Receta de la Crema de Guisantes y Espinacas
Ingredientes (4 raciones):
- 300 g de guisantes frescos o congelados
- 100 g de espinacas frescas
- 1/2 puerro
- 1/2 cebolla mediana o 1 pequeña
- 1 diente de ajo
- 500 ml de caldo de verduras casero o agua
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
- 1 yogur natural sin azúcar o 1/2 vaso de leche (opcional, para darle cremosidad)
- 1 cucharadita de cúrcuma (opcional, por sus propiedades antioxidantes)
Elaboración Paso a Paso:
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Preparar los ingredientes:
- Lava bien las espinacas y escúrrelas.
- Pela y pica el puerro y la cebolla en rodajas finas.
- Pela y corta el ajo en láminas.
- Si los guisantes son frescos, desgranalos. Si son congelados, no hace falta descongelarlos previamente.
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Sofreír el puerro y ajo:
- En una olla, calienta el AOVE a fuego medio.
- Agregue el puerro, la cebolla y el ajo y sofríe durante 5 minutos hasta que el puerro esté tierno y translúcido.
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Cocinar los guisantes y espinacas:
- Incorpora los guisantes y remueve durante 2 minutos.
- Agrega el caldo de verduras caliente y deja hervir a fuego medio durante 8-10 minutos hasta que los guisantes estén tiernos.
- Agregue las espinacas en el último minuto de cocción para conservar su color y nutrientes.
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Triturar y dar textura:
- Retira del fuego y tritura con una batidora de mano hasta obtener una crema fina.
- Si la quieres más cremosa, agrega el yogur natural o la leche y vuelve a batir.
- Ajustada de sal y pimienta al gusto.
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Servir y decorar:
- Sirve caliente con un chorrito de AOVE y, si te gusta, con unas semillas de sésamo o pipas de calabaza por encima.
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Esta crema te aporta energía de forma sostenida, gracias a los carbohidratos que se absorben poco a poco, lo que te mantiene activo durante el día. Además, los guisantes son una excelente fuente de proteínas vegetales, perfectas para la reparación y el crecimiento de tus tejidos, y la fibra que contienen ayuda a que tu sistema digestivo funcione de maravilla.
Las espinacas, el puerro la cebolla y el ajo se unen para ofrecerte un combo de vitaminas que refuerzan tu sistema inmunológico, cuidan tu piel y ayudan a mantener una buena salud visual. Y, por supuesto, el aceite de oliva virgen extra no se queda atrás, ya que sus grasas saludables colaboran en el bienestar del corazón y en el equilibrio general de la dieta.
Consejos y Trucos:
Para una textura aún más sedosa: Pasa la crema por un colador fino o chino después de triturar.
Para potenciar el sabor: Añade un poco de cúrcuma o jengibre le da un toque especiado y antioxidante.
Si quieres hacerla más saciante: Puedes agregar unas lentejas cocidas antes de triturar, lo que aumentará su aporte de proteínas y fibra.
¿Fría o caliente? Esta crema es perfecta tanto caliente en invierno como fría en verano tipo "gazpacho verde".
Si usas guisantes congelados: Escáldalos 1 minuto en agua hirviendo antes de usarlos para potenciar su color y sabor.
Una crema ideal para toda la familia, reconfortante y llena de beneficios.
¡Que aproveche!